La principal vía de comunicación que existe con Guanacaste y Nicaragua, que es la Interamericana norte, estará cerrada por lo menos durante tres días, debido a que la crecida del río Seco a su paso por Miramar de Puntarenas, rompió y arrastró una parte del asfalto de la calzada y quedó en el lugar un gran boquete de seis metros de diámetros, en las proximidades del puente.
Esta importante ruta de paso del turismo y del transporte estará cerrada hasta que se terminen las obras de reparación que podrían durar unos tres días, según comentó el ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Francisco Jiménez. Ahora la ruta alternativa que existe para llegar a la frontera de Peñas Blancas, o a la provincia de Guanacaste, es por San Carlos y Tilarán.
Unos minutos antes de las 20:00 horas el desbordamiento del río Seco provocó la destrucción de la calzada que ya se encontraba en mal estado. En ese momento un tráiler iba pasando por encima, aunque el chofer logró escaparse ileso de la cabina del vehículo que terminó siendo arrastrado por las aguas. Antes de ocurrir esto el agua cubría unos 60 centímetros los puentes cercanos y la Policía de Tránsito procedió de forma inmediata a cerrar el paso de la vía, desviando a los conductores para evitar cualquier tipo de accidente.
Según el ministro Jiménez se realizará una minuciosa inspección de la armazón del punte y en los otros cuatro pasos afectados por esta creciente. Y según el diagnóstico de la empresa Consultoría y Construcción, sólo en la provincia de Puntarenas había cuatro estructuras que presentaban “riesgo inminente de impedimento del paso vehicular por el mal estado” y aún así no habían sido reparadas.